domingo, 25 de septiembre de 2011

Sé que no se ira de mi mente, yo nunca olvido a nadie, aunque lo intente con todas mis fuerzas. Y sé que cuando alguien me pregunte por mi primer amor, sera su imagen (con su sonrisa) la primera que vendrá a mi cabeza... Puede que ahora mismo (lo/me) odie un poco pero se que en un futuro me acordaré y me echaré a reír. Reiré porque es absurdo el novelón en el que andabamos metidos, prometerse la vida, jurar amarse siempre, creer que pasarán el tiempo y todo seguira tan bien como siempre, que nunca pesaran los daños, pensar que será la única persona en mi vida y que no habrá nadie más; y ni hablar de los viajes que planeabamos juntos y todas las promesas que se quedaron en el viento. Y aún teniendo conciencia de ello, seguimos prometiendo tonterías; continuamos dándolo todo hasta que ya no queda nada.


Ha pasado tanto tiempo desde que me dediqué a no hablar de ti, desde que me dediqué a olvidarte que recordar el día preciso en que te conocí es como recurrir a los libros de história para investigar a fondo un acontecimiento y encontrar solo una fecha. Ya no recuerdo el olor de tus besos, de tu cuerpo, de tus sueños, de ti. No recuerdo si vino primero el último o si, por el contrario, los ordenes siempre estuvieron invertidos y yo siempre me halle frente a un espejo viendo el reflejo de lo que realmente era.
Me encuentro entre mi pasado (que asi no quiera aceptarlo, lleva tu nombre, tu apellido e incluso tu tipo de sangre) y mi futuro (que lleva su nombre, sus sonrisas, su apellido, su forma de mirar, los latidos que van al ritmo de su corazón...); No se a donde debo mirar. No se si debo caminar o si por el contrario volver la vista atrás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario