Moratada.

Camina por la avenida pateando una roca, mirando el cielo de vez en cuando para no perder el rumbo. Ella daba la vida por ti, y es gracioso pensar asi, nunca nos hicimos eternos pero desde siempre y para siempre seras un punto de partida, ese imperfecto prototipo soñado. Antes existieron muchos mas pero ninguno como Tú. No te acercas a ser el hombre perfecto y te aborresco por eso. Le diste alas a sus besos y d-años a su tiempo, le diste toda la magia, el amor, la dulzura, le diste las ganas de volver a enamorarse y las pautas para encontrar un futuro amor que en comparación no sera comparable.

Se encuentran las miradas derepente y sin esperar al cruce de ese semaforo, las mismas miradas amarillas y verdes, pero sin ese brillo que bombeaba con la sangre, se encuentran. Baja la cabeza. Es un placer encontrarse pateando la misma roca por el camino. Y ya esta, el cielo se tiñe de rosa, Ella evoca los recuerdos que tiene tan presente en su subconsciente, piensa en esa guitarra azul que ha dejado olvidada en la casa de aquel amigo por miedo a encontrarse tocando las mismas cuerdas. Piensa en sus viejas converses rotas que fueron testigos de tantas veladas carentes de final. En el queso parmesano y en los abrazos por la espalda que la hacian sentir segura asi andara por delante. Ni se inmuta ¿Como puede permanecer tan tranquila? Ella no consigue sentir mas alla de hambre o frio.... Pero a El los recuerdos lo apuñalan por la espalda, la puerta se abre y miles de recuerdos entran en una casa vacia. Aprieta los puños con fuerza y le sube el volumen a esa canción que solo consigue recordarla mas. Solo consigue recordarle el por qué toma el camino mas largo para no pasar en frente de esa ventana de Julieta abandonada.

"Decias que te encataban sus mejillas sonrosadas, te enamoraste de ellas pero ya han perdido su color carmin; Tambien soltabas palabras sin pensar, sin dolor aparente..."

Voltea con la esperanza de que ese pequeño movimiento no sea sincronizado por ese cuerpo distanciado 6 pasos. Alza la cabeza, y sonriendo al cielo, repite esa palabra en voz alta. Una sola vez. "Si, aqui estas, recordando las peleas, las risas y las lagrimas derramadas. Sin poder suplicarle que por favor no llore mas, que siga adelante por ti" .... Por ella. Ella mercenaria de una guerra a la que llaman amor. Ella, ama y señora de momentos olvidados.
Recuerda el momento justo de la llamada desesperada, llamada de palabras huidizas y luego nada. Puf, ya no estas, no vas a volver. No vas a volver y El te odia por eso .... No puedes ni imaginar cuanto te extraña.