Es como si hubieras desaparecido de la faz de la tierra y lo que queda de ti es una apariencia; ... pero esas personas y esos lugares siguen allí, intactos, con la misma marca, con el mismo aire y el leve susurro que dejaste antes de irte, antes de irme, antes de que nos dejáramos ir y entonces me llegas de golpe para recordarme que lo hice mal que existió una época en mis calendarios donde todo lo hacia en torno a dos movimientos: Respirar & Amarte.
Te apareces de la manera mas ruin posible para recordarme que hubo un tiempo en que esos dos ojos color bichitos-del-mar fueron mi reposo, te acercas con tu caminar de flaco desgüalamido y recuerdo esos huesos sobre los mios, esos besos sobre los mios, esos momentos en que logramos sumar 1 + 1 y dimos 1. Pensé en ti, en la luna que había acompañado nuestros sueños, en los deseos, promesas, proyectos que siempre tuvimos, había jurado no llorarte, pero que mas puedo hacer si el corazón me pide a gritos salir de mi? ... No se tranquilizan las aguas cuando se estancan, ni se hacen los besos cuando se dan, ni te veo sorprendido ante mis latidos, es que ya nos fuimos, ya nos hemos despedido, ya nos sumamos y nos restamos respectivamente, nos consumimos en momentos, en sonrisas, lagrimas que lloré, lloré porque recordé que jamas ame tanto a un ser, sin embargo me seque la cara para enviarte un pensamiento violeta, uno verde, uno amarillo, uno azul cielo, y morí por última vez en su nombre, en su recuerdo, en el instante preciso para recordar cada momento en el que me engañe sintiéndote cuando no lo hago, el momento preciso para dar media vuelta y, al fin, decir(te) Adios.
Otra forma de decir te quiero, es callar, dar la vuelta y seguir el camino sin más ni menos de lo que ya está. Me gustas, te quiero, te amo,
te odio, te odié, te amé, te quisé, me gustabas.
Hola ¿Y tu nombre es? ... (Adios.)
